Han pasado 40 años desde la tragedia. Se suponía que los Juegos Olímpicos de Munich se convertirían en un símbolo de la renovada Alemania y de otros países que fueron "culpables" de la Segunda Guerra Mundial. Esto no sucedió: 11 atletas israelíes fueron aterrorizados por extremistas palestinos y los organizadores de los Juegos no pudieron prevenir o reprimir el conflicto. ¿Fue un trágico accidente o una conspiración premeditada? Todavía no hay respuesta a esta pregunta.
El 5 de septiembre de 1972, terroristas palestinos armados del grupo Septiembre Negro entraron sin obstáculos al área de los Juegos Olímpicos y tomaron como rehenes a 11 atletas israelíes. Esto sucedió a las 4:10 am. Munich no estaba en absoluto preparada para tal desarrollo de eventos: guardias desarmados, una valla decorativa alrededor de la Villa Olímpica. Los extremistas radicales exigieron la liberación de las cárceles israelíes de 232 miembros de la OLP, dos terroristas alemanes y 16 prisioneros en las cárceles de Europa occidental.
La primera ministra israelí, Golda Meir, se negó a negociar con los terroristas. Los servicios secretos israelíes ofrecieron su ayuda para liberar a los rehenes, pero los alemanes no la aceptaron. Como resultado, los 11 atletas murieron. También murieron 5 militantes y un policía alemán Anton Fligerbauer. Por cínico que parezca, la muerte de un policía sirvió para la percepción de lo sucedido: ambos pueblos sufrieron a manos de los extremistas, y fue posible expresar participación y simpatía a Israel sin sentirse culpables. Los nombres de los israelíes asesinados: David Berger, Yosef Romano, Moshe Weinberg, Eliezer Khalfin, Zeev Friedman, Mark Slavin, Andrey Spitser, Kehat Shor, Amitsur Shapiro, Yaakov Springer.
Las autoridades de la RFA respondieron negativamente a la solicitud de Israel de suspender los Juegos Olímpicos. Motivaron esta decisión por el hecho de que la "retirada" significaría la victoria del terrorismo mundial, la sumisión a él. Entonces, los deportes continuaron al día siguiente. Como resultado, la Unión Soviética se llevó 50 medallas de oro, Estados Unidos - 33. Es interesante notar que cada quinto "oro" del equipo estadounidense pertenece al judío Mark Spitz.
Los esfuerzos de seguridad de la policía alemana se consideran una de las operaciones más desastrosas en la historia de los servicios especiales. ¿Es esto un accidente? La edición alemana autorizada Der Spiegel ("El espejo") publica algunos documentos relacionados con los acontecimientos de hace cuarenta años. Estos documentos indican que los servicios especiales alemanes fueron advertidos dos veces sobre el inminente ataque terrorista. Sin embargo, subestimaron la importancia de la información recibida y estaban seguros de que el grupo de Septiembre Negro estaba mal preparado y no sería capaz de “dar la vuelta” en una ciudad abarrotada de invitados, y por lo tanto dejar que las cosas fueran por sí mismos.
Al mismo tiempo, se supo que el "Septiembre Negro" fue asistido por neonazis alemanes. Wolfgang Abramovski y Willie Pohl, miembros del Grupo de Resistencia Nacionalsocialista para la Gran Alemania, trabajaron en estrecha colaboración con los terroristas. Quizás estos eran ecos del nacionalsocialismo supuestamente "caído" hace 27 años. Por cierto, la capital de Baviera, Múnich, se encuentra geográficamente adyacente al famoso campo de concentración de Dachau. ¿Coincidencia?
Durante los próximos 40 años, Alemania ha tratado de ocultar las huellas de sus errores. Mientras tanto, la inteligencia israelí Mossad está lanzando una operación llamada "La ira de Dios". "Israel hará todo el esfuerzo y la capacidad que tenga nuestro pueblo para adelantar a los terroristas dondequiera que estén", dijo Golda Meir en la Knesset. Se elaboró una lista de tareas prioritarias, encaminadas a neutralizar y eliminar no solo el "Septiembre Negro", sino también toda la red terrorista en Europa. ¿Hasta cuándo los extremistas seguirán “violando” el orden público?
El verano de 2012 marca los Juegos Olímpicos de Londres. Aquí se han tomado medidas de seguridad colosales. La villa olímpica está rodeada por 18 kilómetros de vallas eléctricas, protegida por 13, 5 mil soldados, muchas unidades caninas, cañones antiaéreos y cazas están preparados. Por un lado, tal pragmatismo está justificado, por otro lado, la fiesta de "Paz y Amistad" se convierte en una expectativa tensa. ¿La verdadera atmósfera de los Juegos Olímpicos será cosa del pasado? Es importante comprender que el extremismo solo puede ser derrotado por los esfuerzos combinados de toda la comunidad mundial.