Los padres modernos colocan el deporte en uno de los primeros lugares en el desarrollo de los niños. Después de todo, es necesario desarrollar el cuerpo y el espíritu, aprender a alcanzar metas, ser persistente y ser capaz de actuar en equipo, o no tener miedo de tomar una decisión. Después de todo, preparar físicamente a su bebé es fundamental. Pronto la carga de la responsabilidad en forma de carpeta recaerá sobre sus hombros y tendrá que sentarse durante mucho tiempo en el pupitre de la escuela. Además, no se olvide de la perseverancia y la resistencia, la responsabilidad y la sistematización, que son inculcados por el deporte profesional habitual o la educación física.
Muchos le profetizan a su hijo la carrera de un gran maestro, olvidándose por completo de la individualidad de una pequeña personalidad. Pero cada deporte establece su propio marco: físico, flexibilidad, carácter, actitud emocional y mucho más. Y, por supuesto, cuanto antes empieces las clases, mejor. La edad más adecuada para iniciar una carrera deportiva es de tres a cuatro años. Todo depende de la dirección elegida.
Y aquí está la primera sesión de entrenamiento largamente esperada, y luego una intensa búsqueda de esos mismos premios. Y, muy posiblemente, al niño le gusta todo y está contento con ello. Entonces solo queda observar cuidadosamente su bienestar, no olvidarse del descanso y la nutrición adecuada. Pero también sucede de otra manera.
La ecología actual tiene un efecto perjudicial sobre la salud tanto de adultos como de niños. Fumar, beber bebidas alcohólicas y otras tentaciones del siglo XXI no favorecen la aparición de una descendencia sana. La inmunidad reducida, la masa muscular debilitada y otros indicadores de reducción de la categoría de salud suelen ser compañeros de una persona moderna.
Y ahora el joven atleta ya es caprichoso, no quiere ir a la escuela, al jardín de infantes, al gimnasio. Duerme en movimiento, a veces sin montar, constantemente no le gusta algo. Pero aquí vale la pena pensar en la corrección de la elección de los padres, porque lo más probable es que el bebé solo esté cansado. Quizás tenga sentido prestar atención a las secciones con un horario más adecuado y menos carga. Un horario suave no permitirá que te canses mucho, el entrenamiento regular templará tu carácter, tus músculos se fortalecerán y el desarrollo de tu bebé adquirirá nuevos horizontes. Pero no habrá competencia dura, actividad física agotadora orientada a lograr un resultado, sino quitando tiempo de juegos, amigos y nuevos conocimientos que son tan importantes a esta edad.
Siempre hay una opción. El niño definitivamente mostrará talento. ¡Y solo después de escuchar, los padres tomarán la decisión correcta!