La actividad física es fundamental para estar sano y en forma. El ejercicio regular protege al cuerpo de enfermedades graves como la obesidad, la diabetes y la artritis. El ciclismo es una de las mejores formas de reducir el riesgo de problemas de salud asociados con un estilo de vida pasivo.
El ciclismo es un ejercicio gratificante y de bajo costo. Está disponible para personas de todos los grupos de edad, siempre que no existan restricciones prescritas por un médico. Ir en bicicleta, por ejemplo, al trabajo oa la tienda, es una manera fácil de combinar las tareas diarias con una actividad física eficaz. Solo se necesitan de dos a cuatro horas a la semana para obtener los máximos beneficios para la salud.
Para las personas con discapacidad, se encuentran disponibles modelos de bicicletas en los que el pedal debe girarse con la mano. Se utilizan correas de velcro para fijar las manos.
Fortalecimiento del tono muscular
A pesar de la creencia popular, el ciclismo hace más que fortalecer los músculos de las piernas. Casi todos los músculos del cuerpo están involucrados en este ejercicio, por lo tanto, el ciclismo contribuye al fortalecimiento general del tejido muscular. Además, el riesgo de estirarse es bastante bajo. Como resultado del ejercicio regular, mejorará la movilidad de las articulaciones de la cadera y la rodilla; piernas, muslos, espinillas adquirirán un excelente alivio muscular. El ciclismo también mejora la postura al fortalecer los músculos de la espalda que sostienen la columna.
El sistema cardiovascular
Al andar en bicicleta, la frecuencia cardíaca se nivela. Las investigaciones han demostrado que ir en bicicleta al trabajo aumenta la resistencia cardiovascular en un 3-7%.
Según la Asociación Médica Británica, el riesgo de ataque cardíaco se puede reducir en un 50% recorriendo una distancia de unos 30 km por semana en bicicleta.
Quema de calorías
La bicicleta es tu mejor ayudante en la lucha contra los kilos de más. Pedalear a un ritmo medio quema un promedio de 300 kilocalorías por hora. Si hace ejercicio durante 30 minutos al día, en un mes puede perder hasta 5 kilogramos de grasa. Además de ayudar a desarrollar músculo, este ejercicio también mejora el metabolismo.
La diabetes a menudo se asocia con un estilo de vida sedentario. Un estudio global de Finlandia encontró que el ciclismo regular redujo el riesgo de diabetes tipo 2 en un 40%.
Coordinación y estrés
Al andar en bicicleta, todas las partes del cuerpo están involucradas. En consecuencia, mejora la coordinación del movimiento de brazos, piernas, pies y manos, así como la coordinación visual y auditiva.
Los psicólogos afirman que el ciclismo regular reduce los niveles de estrés y trata la depresión, además de aumentar la autoestima y la confianza en uno mismo. Esta es una buena manera de estar a solas con la naturaleza, disfrutar del aire fresco y sentirse libre. Estas actividades ayudan a olvidarse de los problemas diarios y contribuyen a deshacerse de las dificultades mentales.