Aquellos que corren con mucho placer cuando hace buen tiempo no están muy contentos de ir a trotar bajo la lluvia. Y en vano. Correr bajo la lluvia puede ser un placer doble: te mantienes en forma y al mismo tiempo disfrutas del aire limpio y lavado por la lluvia. Solo necesitas vestirte para no mojarte de la cabeza a los pies.
Instrucciones
Paso 1
Solo puedes correr bajo la lluvia si tienes el atuendo adecuado. La ropa para correr depende de la temperatura ambiente y la lluvia. En la ciega lluvia del verano, no puedes ponerte nada especial, manteniéndote con tu ropa de entrenamiento habitual, que se secará antes de que puedas llegar a casa.
Paso 2
Si hace viento afuera y solo un par de gotas caen ocasionalmente del cielo, necesitará una buena cazadora en forma de chaleco ligero. Mantendrá el cuerpo caliente protegiéndolo del aire frío; permanecer las manos desnudas evitará naturalmente que el cuerpo se sobrecaliente.
Paso 3
Cuanto más frío hace el clima y más fuerte la lluvia, más rápidamente aumenta la necesidad de una chaqueta gruesa e impermeable. No debe detenerse en la opción barata, es mejor pagar un poco de más, pero llevar ropa de alta calidad que no solo no se moje, sino que también pueda respirar. De lo contrario, después de un par de cientos de metros, se sentirá como una casa de baños. Afuera mojado de lluvia, adentro de sudor. Las chaquetas regulares no son muy adecuadas para correr, por regla general son bastante gruesas, pero si no tienes nada más a mano, puedes probar lo que saldrá de ellas.
Paso 4
En cuanto a los zapatos, no se pueden evitar los pies mojados. No use botas de goma para trotar, y las zapatillas de deporte comunes se mojarán en un grado u otro. Dado que sus pies estarán en constante movimiento, la hipotermia no lo amenazará, pero esté preparado para los callos que aparecen fácilmente cuando los zapatos rozan la piel húmeda. Puede pegar previamente un parche impermeable en los puntos vulnerables, lo que reducirá la probabilidad de lesionarse las piernas.
Paso 5
Si usa anteojos, necesitará un sombrero con una visera grande, como una gorra de béisbol, para correr bajo la lluvia. Protegerá el vidrio de las gotas que caen, le mantendrá la visibilidad del camino y le salvará de pequeños problemas como meter el pie en un charco. E incluso si tiene una vista excelente, no descuide el sombrero cuando hace frío. Una cabeza mojada en combinación con bajas temperaturas contribuye a un debilitamiento del sistema inmunológico, lo que significa que no cuesta absolutamente nada enfermarse a este respecto.