El esquí alpino ha dejado de ser una disciplina puramente deportiva, convirtiéndose en una forma muy popular de recreación activa para millones de personas en todo el mundo. Los Alpes son considerados la cuna del esquí alpino, pero ahora hay pistas de esquí incluso en países donde no hay absolutamente ninguna nieve. Todos ellos permiten esquiar a cualquier persona, independientemente de su experiencia y titulación deportiva.
Todas las pistas de esquí, según los indicadores de complejidad, se pueden dividir condicionalmente en varias categorías.
Senderos para principiantes
Las pistas verdes se encuentran entre las más sencillas. Los esquiadores principiantes pueden moverse por ellos "en línea recta", prácticamente sin velocidad. Entonces, en presencia de una pendiente ligeramente mayor, siempre hay un sesgo contrario. En la mayoría de los casos, incluso los esquiadores que no saben girar definitivamente se detendrán. Dichos senderos están cuidadosamente cuidados para que no haya baches.
No hay restricciones de edad en el esquí alpino. Puede comenzar a los 4-6, 11-12 y 14-15 años. Y la edad de jubilación no es un obstáculo para esquiar.
Nivel promedio
Le siguen en dificultad las pistas azules, destinadas a esquiadores del llamado nivel intermedio. En recorridos de este tipo, el desnivel de algunos tramos aumenta, junto con un relieve variable. También se caracterizan por la ausencia de montículos, cambios bruscos en las pendientes del relieve, la presencia de una mayor pendiente. Todo ello hace que el descenso por la pista azul sea más variado e interesante, y los tramos rectos, frecuentes y con ligera pendiente permiten rodar a gran velocidad.
Senderos para profesionales
Las carreras rojas se consideran difíciles. Están especialmente creados para deportistas de alto nivel. Los senderos de este tipo se distinguen por una pendiente aún mayor, la ausencia de secciones planas con una combinación de lugares cortos y empinados. Para esquiar en tales pistas, debe ser muy bueno en giros de radio corto con esquís paralelos, lo que le permite extinguir la velocidad a tiempo. Los esquiadores experimentados en las pistas rojas pueden esquiar en arcos pequeños y grandes en todo el rango de velocidad. Estos senderos están muy cuidados, ya que con un gran número de esquiadores, pueden aparecer baches al final del día.
El primer lugar entre las mejores pistas de esquí lo ocupa el canadiense Whistler. Se encuentra a 120 kilómetros de Vancouver.
Además, una serie de pistas fuera de pista con menos inclinación entran en esta categoría, que, debido a las características naturales, no se puede recomendar para esquiadores con poca experiencia en el esquí. Las pendientes de este tipo suelen estar marcadas con una línea punteada roja.
Los senderos negros son especialmente difíciles: están diseñados para profesionales, ya que se caracterizan por secciones difíciles, desde tablas duras y empinadas con baches hasta nieve virgen, lugares no suaves, sino estrechos, giros bruscos con varias pendientes. En los diagramas, los descensos de este tipo se indican mediante una línea punteada negra. También incluye golpes artificiales para halfpipe, mogul y saltos para snowboarders.