Las nalgas elásticas con líneas redondeadas se consideran el estándar de atractivo en la actualidad. Si la naturaleza no le ha otorgado tanta riqueza, entonces tómese la molestia de bombear los músculos de los glúteos. No será posible lograr cambios muy rápidamente, pero si practica sistemáticamente, en un mes disfrutará de un alivio estrictamente convexo. En este caso, solo hay un enemigo: tu pereza.
Instrucciones
Paso 1
Comience calentando sus músculos. Junta los pies, haz curvas. Establezca una regla para usted: toque el piso con la punta de los dedos cada vez. Incluso si su columna vertebral no le permite hacer esto, los músculos de las nalgas aún se estirarán hasta cierto punto y se volverán más elásticos. Esto aumentará el efecto de los ejercicios posteriores.
Paso 2
El ejercicio pélvico más eficaz son las sentadillas. Por lo tanto, cada vez haz el número máximo de sentadillas, dependiendo de la fuerza de tu cuerpo. Recuerde que la cantidad de enfoques del ejercicio juega un papel importante.
Paso 3
Si no practicas diez veces al día, tendrás que mover la barra a tiempo durante un mes más. Controle la calidad de sus sentadillas. Obtendrá la carga necesaria solo si sus talones están apoyados en el piso. Imagínese atornillándolos.
Paso 4
Deberá acostarse boca abajo. Extiende tus brazos paralelos a tu torso. Apoya la cabeza contra la barbilla. Ahora levante las piernas rectas una por una. Saca los calcetines al máximo. Este es el punto clave del ejercicio. Mantenga la posición extrema tanto como su fuerza le permita. La duración de un enfoque es de 10 a 15 minutos. Evite los descansos.
Paso 5
Necesita acostarse boca arriba. Coloque sus nalgas en sus palmas. Ahora doble las rodillas. El movimiento fundamental es elevar la pelvis a la mayor altura posible. Al mismo tiempo, intente tensar los músculos de los glúteos. Cuando la pelvis esté en una posición elevada, extienda y lleve las rodillas. Continúe hasta que aparezcan las primeras sensaciones dolorosas.
Paso 6
Coloque las palmas de las manos en el suelo, arrodíllese. Una rodilla permanece en el suelo y la otra se endereza y se balancea. Asegúrese de que la punta del pie apunte hacia abajo. Cambia de pierna, repite de todos modos con la segunda pierna.
Paso 7
Si su ejercicio ha comenzado a funcionar, complíquelo: levante las piernas dobladas y estírelas con el peso hacia arriba con el talón, y luego llévelas también al estado doblado en el peso. La siguiente etapa: también haces todo, no hacia arriba, sino hacia un lado. El swing ideal alcanza los 90 grados.