La mayoría de las personas se engañan a sí mismas pensando que solo se puede aprender a nadar en la infancia. Lo más importante es deshacerse del miedo a ahogarse, porque interfiere con la sensación de calma en el agua. Solo necesita comprender que una persona no se ahogará de ninguna manera cuando su pecho esté lleno de aire. Estos ejercicios te ayudarán a aprender a nadar en el menor tiempo posible.
El primer ejercicio es el ejercicio de flotación. Sumérjase en agua a la altura del pecho e inhale profundamente. Aguante la respiración y, en cuclillas, sumérjase en el agua y entierre la nariz en las rodillas. Mantenga durante unos segundos en esta posición, permitiendo que el cuerpo flote. Repítelo varias veces para aprender a sentirte seguro en el agua.
El segundo ejercicio que te ayudará a aprender a nadar es deslizarte sobre el agua sobre tu estómago. También ve al cofre en agua, inhala y acuéstate sobre el agua para que tu rostro quede sumergido en ella. A continuación, empuje con los pies desde abajo y comience a deslizarse en dirección a la orilla, mientras mueve los pies hacia arriba y hacia abajo, estirando los calcetines después de empujar. Una vez que haya aprendido a deslizarse durante mucho tiempo, use sus manos mientras se desliza como si estuviera rastrillando agua frente a usted.
El tercer ejercicio será deslizarse sobre el agua sobre su espalda. La mayoría teme ahogarse en esta posición y bajar las piernas al agua, pero debe entenderse que es casi imposible ahogarse en esta posición, y al bajar las piernas, simplemente no aprenderán la habilidad de nadar. en sus espaldas. Para realizar el ejercicio, métete también al agua, relájate, acuéstate en el agua fingiendo que estás acostado sobre un anillo o colchón inflable e intenta tumbarte allí un rato. Cuando aprenda a acostarse más o menos en esta posición, intente deslizarse hacia la orilla con las manos, sin cambiar de posición.
Al dominar estos ejercicios, puede aprender a nadar con seguridad, ya sin miedo al agua.
Es un grave error que una persona intente levantar más la cabeza al nadar para no atiborrarse de agua, pero no es así. Entonces, solo el cuello se cansará y el cuerpo no estará completamente paralelo al agua, lo cual no es un factor sin importancia en el entrenamiento. Debes sumergir la barbilla en el agua. En esta posición, puedes nadar una gran distancia y tu cuello no se cansará.
Debe realizar el entrenamiento bajo la supervisión de personas que ya saben nadar, y tampoco nadar en agua fría, porque si los músculos están acalambrados, ninguna habilidad lo ayudará.