La ciática es una inflamación del nervio ciático, que también se llama radiculitis lumbosacra. Esta enfermedad casi siempre va acompañada de un síndrome de dolor severo, y su tratamiento es un proceso largo y minucioso, en el que la gimnasia especial juega un papel importante.
La ciática lumbosacra se trata con medicamentos que ayudan a detener la inflamación en el cuerpo y a reducir el dolor. Por eso es muy importante consultar a un médico ante el primer signo de ciática. Además de los medicamentos y las inyecciones, al paciente casi siempre se le prescribe gimnasia especial para mejorar la salud, que actúa como un analgésico natural. También ayuda a aliviar el dolor, conseguir la relajación de las zonas afectadas y eliminar los síntomas de la enfermedad con mayor rapidez.
Se recomienda que los ejercicios para el tratamiento de la ciática se realicen bajo la supervisión de un fisioterapeuta que pueda decirle al paciente cómo moverse correctamente. Sin embargo, en ausencia de tal oportunidad, la gimnasia se puede realizar con cuidado de forma independiente en casa. Pero antes de eso, es muy importante consultar a un médico, ya que en algunos casos, por ejemplo, durante el embarazo, no se recomienda realizar ciertos ejercicios.
Ejercicios de mentira
Acuéstese boca arriba sobre una superficie firme y doble las rodillas. Apriete los músculos de la columna con todas sus fuerzas e intente presionar la columna lumbar contra el suelo. Fije esta posición del cuerpo durante unos segundos, luego relájese. Repite este ejercicio de 7 a 10 veces.
Manteniendo la posición inicial, estire las piernas. Luego, levante lentamente una rodilla hacia la caja torácica, bloquee la posición durante unos segundos y luego regrese la pierna a su posición original. Repite el ejercicio 10 veces con cada pierna. Este ejercicio cuando se pellizca el nervio ciático es recomendado no solo por fisioterapeutas, sino también por expertos en yoga.
Ruede sobre su estómago y estire la espalda tanto como sea posible, enfocándose en los codos doblados. Bloquea la posición durante unos segundos y luego relájate. Al mismo tiempo, las piernas deben permanecer rectas e inmóviles. Este ejercicio también se realiza 10 veces.
Si le resulta difícil hacer 10 repeticiones a la vez, comience con 5, aumentando el número de repeticiones todos los días.
Ejercicios para sentarse
Siéntese en una silla con las piernas cruzadas, enderece la espalda y junte las manos detrás de la cabeza. Realice giros de torso hacia la derecha y hacia la izquierda, cinco veces en cada dirección. Cambia de pierna y repite el ejercicio.
Siéntese en el suelo con las piernas extendidas frente al bicarbonato de sodio y los brazos extendidos hacia los lados a la altura de los hombros. Luego trate de ponerlos a sus espaldas tanto como sea posible. Fije la posición, relájese y luego repita el ejercicio 5-6 veces más.
Realice todos los ejercicios lenta y cuidadosamente para no dañar más el nervio ciático inflamado.
Ejercicio de pie
Párese con los pies separados a la altura de los hombros, levante una mano y deje la otra a lo largo de su torso. Realice 5 curvas hacia el lado opuesto del brazo levantado. Luego descansa y repite el ejercicio con la otra mano y en sentido contrario.